El presidente del CCN, su padre, su hermano y otros altos cargos del partido derechista investigados por financiación ilegal
Ignacio González viajó a Venezuela con Lorenzo Olarte con un maletín cargado de billetes para "ganarse" el voto
inmigrante canario
ALREDEDOR de 850 millones de pesetas gastó el Centro Canario Nacionalista en las elecciones autonómicas y locales de 2007. Cinco veces más de lo que le permitía la Ley de acuerdo a las a su representatividad institucional. (1,1 millones). Una investigación paralela incluida en la de "Las Teresitas" ha destapado este caso de presunta financiación ilegal del partido presidido por Ignacio González Santiago, hijo del presidente de la Cámara de Comercio de Sta. Cruz Tenerife, Ignacio González Martín, quien a su vez es uno de los principales imputados, junto al empresario Antonio Plasencia y el ex alcalde Miguel Zerolo, en la trama de la playa tinerfeña.
Según informaba a finales de la pasada semana la prensa local de Gran Canaria y Tenerife, la "Operación Hubara", como ha sido bautizado este enésimo caso de (presunta) corrupción, está a punto de concluir con datos contundentes que implican a la cúpula del CCN. Ésta se encuentra imputada por cinco delitos diferentes. Los pinchazos telefónicos realizados por la policía desvelan que gastó, de forma ilegal, al menos 5,1 millones de euros para financiar las elecciones que, a la postre, permitirían a Ignacio González ocupara la concejalía de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Sta. Cruz de Tenerife
El caso se instruye en el Juzgado número 4 de esta ciudad, bajo la dirección de la magistrada María de Lorenzo Cáceres-Farizo y con la participación de la Brigada Provincial de la Policía Judicial y la fiscal de Anticorrupción en la provincia occidental, María Farnés Martínez. Sin embargo, la nueva condición de diputado autonómico de Ignacio González haría saltar la instrucción al Tribunal Superior de Justicia de Canarias. González se beneficiaría así, como el ex alcalde de Santa Cruz Miguel Zerolo, del privilegio del aforamiento.
Hasta la fecha se ha conocido que los delitos -electoral, falsedad documental, contra la Hacienda Pública, malversación de fondos públicos y tráfico de influencias- podrían haber sido cometidos por el presidente del partido Ignacio González, su hermano Pedro González -considerado por los investigadores como el cerebro financiero y nexo con las empresas familiares-, su padre Ignacio González Martín -que habría desviado fondos de la Cámara de Comercio hacia el CCN- y otros tres responsables de las cuentas de ese partido: José Luis Langa, Juan Pedro Ruiz e Ignacio Padilla.
Las intervenciones telefónicas han revelado que los altos cargos del CCN hacían campaña con maletines cargados de billetes que, a juzgar por el gasto final que los comicios de 2007 supusieron para la organización política de la familia González, repartían con absoluta prodigalidad para ganar apoyos y “compromisos”.
"Yo vi cómo salía ese dinero del maletín y después pasaban a justificarlo con los laboratorios y con empresas fantasma que tienen", se reconoce en una de las conversaciones interceptadas por la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife a otro de los implicados.
En base a cientos de conversaciones que forman parte de la documentación de la Operación Hubara, la policía asegura que "se identifica a Pedro González Santiago como la persona encargada de efectuar los pagos en metálico y se le vincula en las negociaciones de los contratos con las diferentes empresas que prestaron servicio durante la campaña electoral del CCN".
"Ganándose" el voto emigrante
Varios testigos revelaron a la magistrada instructora, María de Lorenzo Cáceres Farizo, y la delegada de la Fiscalía Anticorrupción en Tenerife, María Farnés Martínez, que uno de los maletines más "cargados" del CCN viajó en plena campaña rumbo a Venezuela con la intención de "conquistar" el voto emigrante. Según estas informaciones, en el viaje a la Octava Isla participaron el propio presidente del CCN y candidato al Parlamento regional Ignacio González; Lorenzo Olarte, entonces candidato del CCN al Cabildo de Gran Canaria; Ramón Díaz, candidato por La Gomera; y Arturo Escuder, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerfe y hombre de confianza del empresario Ignacio González Martín, padre del presidente del partido.
De acuerdo a la información aportada por los testigos era el vicepresidente de la Cámara de Comercio quien llevaba el maletín. "Había mucho dinero e iba pagando a todo el mundo, incluso a los medios de comunicación", reveló uno de estos testigos. El viaje, huelga decirlo, se realizó en primera clase y la expedición se hospedó en diferentes suites del hotel Meliá Caracas. Allí, “dos pistoleros ejercían como guarda espalda" de la comitiva canaria.
Ignacio González: un hombre con "suerte"
La llamada Operación Hubara ha desvelado, asimismo, la presunta compra de billetes de lotería premiados. En un informe, la policía recoge que "el poder de Ignacio González Martín se ha evidenciado en la forma en que decidió repartir los cupones de la ONCE que presuntamente han adquirido ya premiados con la finalidad de blanquear el dinero sobrante de lo dispuesto para la financiación de la campaña electoral del CCN. Este reparto se aprecia que se realiza en función de la participación, dedicación y recursos aportados a la campaña electoral".
¿La revancha de una ex empleada rencorosa?
Evitando hacer mención explícita a la información obtenida a través de estos pinchados telefónicos, el presidente del Centro Canario Nacionalista, Ignacio González Santiago, comparecía el pasado sábado 9 de julio para asegurar públicamente que "la operación Hubara es solamente la revancha de una empleada despedida y la investigación policial no significa nada". En declaraciones a los medios de comunicación, González sostuvo que dicha investigación no les impide "estar muy tranquilos y que la que no tiene que dormir tranquila es la persona que ha montado este tinglado". Afirmación en la que, a tenor del infructuoso resultado de las múltiples investigaciones por escándalos de corrupción destapados en los últimos años en el Archipiélago canario, quizá sea la única en la que resulta difícil llevar la contraria al presidente del Centro Canario Nacionalista.
*Ernesto Gutiérrez (Redacción Canarias-semanal)
Según informaba a finales de la pasada semana la prensa local de Gran Canaria y Tenerife, la "Operación Hubara", como ha sido bautizado este enésimo caso de (presunta) corrupción, está a punto de concluir con datos contundentes que implican a la cúpula del CCN. Ésta se encuentra imputada por cinco delitos diferentes. Los pinchazos telefónicos realizados por la policía desvelan que gastó, de forma ilegal, al menos 5,1 millones de euros para financiar las elecciones que, a la postre, permitirían a Ignacio González ocupara la concejalía de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Sta. Cruz de Tenerife
El caso se instruye en el Juzgado número 4 de esta ciudad, bajo la dirección de la magistrada María de Lorenzo Cáceres-Farizo y con la participación de la Brigada Provincial de la Policía Judicial y la fiscal de Anticorrupción en la provincia occidental, María Farnés Martínez. Sin embargo, la nueva condición de diputado autonómico de Ignacio González haría saltar la instrucción al Tribunal Superior de Justicia de Canarias. González se beneficiaría así, como el ex alcalde de Santa Cruz Miguel Zerolo, del privilegio del aforamiento.
Hasta la fecha se ha conocido que los delitos -electoral, falsedad documental, contra la Hacienda Pública, malversación de fondos públicos y tráfico de influencias- podrían haber sido cometidos por el presidente del partido Ignacio González, su hermano Pedro González -considerado por los investigadores como el cerebro financiero y nexo con las empresas familiares-, su padre Ignacio González Martín -que habría desviado fondos de la Cámara de Comercio hacia el CCN- y otros tres responsables de las cuentas de ese partido: José Luis Langa, Juan Pedro Ruiz e Ignacio Padilla.
Las intervenciones telefónicas han revelado que los altos cargos del CCN hacían campaña con maletines cargados de billetes que, a juzgar por el gasto final que los comicios de 2007 supusieron para la organización política de la familia González, repartían con absoluta prodigalidad para ganar apoyos y “compromisos”.
"Yo vi cómo salía ese dinero del maletín y después pasaban a justificarlo con los laboratorios y con empresas fantasma que tienen", se reconoce en una de las conversaciones interceptadas por la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife a otro de los implicados.
En base a cientos de conversaciones que forman parte de la documentación de la Operación Hubara, la policía asegura que "se identifica a Pedro González Santiago como la persona encargada de efectuar los pagos en metálico y se le vincula en las negociaciones de los contratos con las diferentes empresas que prestaron servicio durante la campaña electoral del CCN".
"Ganándose" el voto emigrante
Varios testigos revelaron a la magistrada instructora, María de Lorenzo Cáceres Farizo, y la delegada de la Fiscalía Anticorrupción en Tenerife, María Farnés Martínez, que uno de los maletines más "cargados" del CCN viajó en plena campaña rumbo a Venezuela con la intención de "conquistar" el voto emigrante. Según estas informaciones, en el viaje a la Octava Isla participaron el propio presidente del CCN y candidato al Parlamento regional Ignacio González; Lorenzo Olarte, entonces candidato del CCN al Cabildo de Gran Canaria; Ramón Díaz, candidato por La Gomera; y Arturo Escuder, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerfe y hombre de confianza del empresario Ignacio González Martín, padre del presidente del partido.
De acuerdo a la información aportada por los testigos era el vicepresidente de la Cámara de Comercio quien llevaba el maletín. "Había mucho dinero e iba pagando a todo el mundo, incluso a los medios de comunicación", reveló uno de estos testigos. El viaje, huelga decirlo, se realizó en primera clase y la expedición se hospedó en diferentes suites del hotel Meliá Caracas. Allí, “dos pistoleros ejercían como guarda espalda" de la comitiva canaria.
Ignacio González: un hombre con "suerte"
La llamada Operación Hubara ha desvelado, asimismo, la presunta compra de billetes de lotería premiados. En un informe, la policía recoge que "el poder de Ignacio González Martín se ha evidenciado en la forma en que decidió repartir los cupones de la ONCE que presuntamente han adquirido ya premiados con la finalidad de blanquear el dinero sobrante de lo dispuesto para la financiación de la campaña electoral del CCN. Este reparto se aprecia que se realiza en función de la participación, dedicación y recursos aportados a la campaña electoral".
¿La revancha de una ex empleada rencorosa?
Evitando hacer mención explícita a la información obtenida a través de estos pinchados telefónicos, el presidente del Centro Canario Nacionalista, Ignacio González Santiago, comparecía el pasado sábado 9 de julio para asegurar públicamente que "la operación Hubara es solamente la revancha de una empleada despedida y la investigación policial no significa nada". En declaraciones a los medios de comunicación, González sostuvo que dicha investigación no les impide "estar muy tranquilos y que la que no tiene que dormir tranquila es la persona que ha montado este tinglado". Afirmación en la que, a tenor del infructuoso resultado de las múltiples investigaciones por escándalos de corrupción destapados en los últimos años en el Archipiélago canario, quizá sea la única en la que resulta difícil llevar la contraria al presidente del Centro Canario Nacionalista.
*Ernesto Gutiérrez (Redacción Canarias-semanal)
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