martes, 15 de noviembre de 2011

La consejera de Sanidad y el Gobierno promueven ahora un “estado de sitio” laboral en los hospitales públicos*


Para Intersindical Canaria ha caído la careta conciliadora de la nueva Consejera y su equipo para mostrar su verdadero rostro déspota y autoritario. El descontento y rechazo generalizado del personal sanitario a los nuevos recortes sanitarios, está siendo replicado por la administración sanitaria con una especie de estado de sitio en los centros de trabajado, manteniendo una injustificada presencia policial, prohibiendo las ruedas de prensa, impidiendo la entrada a los medios de comunicación y hasta tratando de impedir un referéndum en el que los trabajadores se puedan pronunciar sobre las últimas medidas de la Consejería de aumentar la jornada laboral de los sanitarios o la salvaje restricción de las contrataciones. Así el gerente del HUC, siguiendo orientaciones del SCS ha prohibido el ejercicio del derecho del Comité de Empresa a consulta a los trabajadores, previsto en Convenio Colectivo, referéndum que pese a la prohibición de la Empresa y por imperativo legal, se mantendrá convocados para el próximo 18 de noviembre en los dos hospitales públicos tinerfeños. La consulta comenzará a las 8 horas y concluirá a las 22h...



Hoy, nuevas concentraciones de protesta

Paralelamente, hoy martes, 15 de noviembre, tendrán lugar en sendos hospitales dos nuevos actos de protesta, concentrándose y manifestándose los trabajadores durante su media hora de bocadillo en torno a ambos centros sanitarios. Estas protestas mantienen el objetivo de reivindicar el mantenimiento de las 35 horas de jornada laboral y la contratación de la plantilla que actualmente demandan los pacientes y la alta presión asistencial que sufre la sanidad pública.

Mayores riesgos, incluso vitales, para los pacientes

Los nuevos recortes en materia sanitaria, van más allá del ámbito específico de restricciones en la contratación de personal y la jornada laboral del personal. Así, el Gobierno ha dejado en suspenso la financiación para la conclusión de los hospitales del Norte y Sur de la Isla y otras infraestructuras sanitarias, lo que equivaldrá a mantener y elevar las cargas de trabajo sobre la exigua plantilla de trabajadores públicos que, junto a la suspensión de las actividades quirúrgicas extraordinarias, tienen ya como efecto colateral la multiplicación de las listas de espera y los fracasos asistenciales con riesgo vital para los usuarios y pacientes.


Sorprendentemente, CC y el PSOE desangran al sistema público sanitario para transfundir inversiones al sector privado (cuya inversión se mantiene inalterable).

*Cati Darias.

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