Hospital Universitario de Canarias |
Por eso la intención de la Consejería de Sanidad de cerrar plantas del HUC a partir del 1 de julio, con la consiguiente disminución del número de camas para ingreso, se traducirá inevitablemente en un aumento en el tiempo de espera, tanto en urgencias como en las listas de espera quirúrgica y de varias especialidades.
Una vez más se pretende imponer el criterio neoliberal del recorte de un servicio público que perjudicará a una población que cada día lo necesita más. En un momento en que aumentan las desigualdades, con todo su cortejo de patologías, cuando lo que hay que hacer es precisamente lo contrario para atender y apoyar a los más necesitados. La Consejería de Sanidad debe ahorrar en los conciertos con la sanidad privada y proponer recortes en muchas partidas perfectamente prescindibles del conjunto de los gastos del Gobierno de Canarias (de la televisión autonómica, de la policía autonómica, de protocolo, de publicidad, etc.) y reorientar dichos recursos hacia la sanidad pública.
Además, la Administración debe plantearse aumentar los ingresos en las arcas públicas para gastar más en los servicios públicos, básicos para todos especialmente para los que menos recursos tienen. Usar el dinero acumulado de la Reserva de Inversiones de Canarias, intervenir en el fraude fiscal (Canarias es, con un 28,7%, la segunda comunidad con mayor tasa de dinero negro), restablecer el impuesto de sucesiones, gravar progresivamente a las grandes fortunas, a la Banca…..
¡Ya está bien de apretar por el mismo sitio, de perjudicar a los de siempre, ya está bien de tanto despropósito!.
*Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Canarias
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